Aventura y CÍA Aventura y CÍA

Aventuras gráficas al detalle

Reviews

Un hueso con más chicha

Título: Bone: The Great Cow Race (2006)

Desarrolladora: Telltale Games

Distribuidora: Telltale Games

Lanzamiento: 12 de abril de 2006

Especificaciones (mínimo recomendado): Procesador a 1,5 GHz | 256 MB de RAM | 140 MB de espacio en disco | Tarjeta gráfica de 32 MB

# Publicado el por Víctor Martínez 0

Introducción

Poco hay que no se haya dicho al respecto de la compañía Telltale Games. Actualmente están en boca de todo aventurero y no hacen más que generar noticias relacionadas con nuestro mundillo semana sí semana no. Bone: Out of Boneville fue el debut de estos exintegrantes de la otrora prolífica (en términos de nuestro género) LucasArts, y el sabor de boca que dejó en todos los que lo probaron fue bastante amargo, aún a pesar del fútil intento por parte de muchas publicaciones “afines” a la compañía a la hora de disimular sus más que evidentes carencias.

El problema fue, sobretodo, su corta duración en relación al desorbitado precio con el que salió a la venta, más teniendo en cuenta que por lo que pagábamos no era ni tan siquiera algo físico, sino una clave que nos permitiese desbloquear el juego entero.

La falta de traducción a nuestro idioma ha hecho que en los países hispanohablantes el juego no tenga la misma resonancia que en los de parla inglesa, cosa que no ha impedido que sigamos mirando la compañía con esperanza, quizá porque somos conscientes de que estos señores son los que van a volver a poner a Sam & Max en circulación, por mucho que nos espanten este tipo de distribuciones por capítulos. Y hablando de capítulos, Bone: The Great Cow Race es el segundo de lo que se espera que sea una larga saga que adapte la totalidad de los volúmenes que componen la obra de Jeff Smith, el creador de estos prestigiosos personajes.

Más largo, con más puzzles y más barato se presenta esta segunda entrega que pasamos a comentar.

Argumento

The Great Cow Race empieza tranquilamente en el pequeño pueblo de Barrelhaven, donde se vuelven a reencontrar los tres primos Fone, Phoney y Smiley Bone tras el ataque de las ratas en casa de la abuela Ben. Al mismo tiempo, la anciana se prepara para el gran evento popular: la Gran Carrera de Vacas, en la que durante años la abuela Ben ha batido al ganado más veloz, por lo que un año más las apuestas están claramente a su favor.

El ambicioso Phoney ve en las apuestas de vacas un gran filón por explotar, y manipula al bueno de Smiley para que se disfrace de vaca y compita en la carrera. Mientras tanto, Fone Bone se da cuenta de que está enamorado de Thorn, y como buena tía que se precie (perdón por la frase machista) se enfada con él por discutirse con el chulito del pueblo por el que casi al instante empieza a sentir interés. El pobre Fone se las verá y deseará para complacer a la chica.

Comentario

Una vez terminado The Great Cow Race, la impresión que nos queda es que, efectivamente y como apuntan la mayoría de medios que lo han tratado, estamos ante un juego más grande, largo y redondo que la primera y desafortunada entrega. Pero superar el despropósito de implacable afán de lucro por parte de Telltale que fue Out of Boneville no es ningún mérito en sí; conseguir que de un argumento tan burdo como el de Bone 2 e impropio de un videojuego salga algo decente, sí que lo es.

De nuevo nos encontramos con sensaciones enfrentadas que debemos analizar independientemente para poder dar un juicio más o menos objetivo de este producto. Para empezar, y mirado fríamente, serán los puzzles los que nos hagan sobrellevar la nadería de su argumento. Y es que el objetivo de los personajes es tan insulso como divertido puede ser en su formato original, el cómic. Pero una vez lo pasamos al terreno del videojuego, la empatía con los personajes no llega al nivel de interesarnos mínimamente nada de lo que hagan o tengan que hacer. Máxime si el cometido en el juego del protagonista es conseguir paliar el enfado de la chica en base a regalarle cosas y escribirle poesías, el de Phoney convencer a los frecuentes de la taberna, y el de Smiley construirse un disfraz de vaca.

Por lo menos, y a diferencia de Out from Boneville, el ritmo de este capítulo está mucho más cuidado, los puzzles también y la narración utiliza, cuanto menos, la indispensable fórmula de presentación, nudo y desenlace, aunque el inicio se nos antoje demasiado precipitado, y su segundo acto peque de poco original.

Dave Grossman, por suerte, parece haber tomado las riendas del diseño y ha puesto los puntos sobre las íes, dando una lección de elaboración de enigmas y narración audiovisual a sus compañeros de Telltale. Para ello se vale de la fórmula que tan bien les sirvió a él y a Tim Schafer en Day of the Tentacle, y esta vez las peripecias de los tres personajes las podremos resolver casi en cualquier orden. Esto significa que podremos alternar entre ellos a nuestro antojo, pero determinadas acciones de uno tendrán repercusión en los acontecimientos de los otros. Esto va especialmente bien para darnos tiempo para pensar a la hora de resolver algunos enigmas, así como para cortar un poco con la linealidad de las acciones durante el juego.

Los puzzles, por su parte, son mucho más inteligentes y elaborados que los del primer Bone, aunque no por ello van a llegar a niveles de dificultad importantes. Además, el sistema de pistas es tan tentador que es imposible quedarnos encallados en ningún momento, lo cual disminuye nuestra antipatía para con la aventura, pero al mismo tiempo reduce los niveles de satisfacción a la hora de resolver sus entresijos. Si a esto le añadimos la relativamente corta duración del juego, así como los pocos escenarios por los que nos moveremos (además todos estéticamente iguales, lo que lo convierte más aún en un episodio dependiente de otros para que verdaderamente llegue a funcionar), el resultado no es más que un placebo bien diseñado, pero que inevitablemente nos sabe a poco.

Por suerte se han dejado de lado los estúpidos minijuegos con los que estaba trufada la primera entrega, y en lugar de ellos se han implementado más puzzles de lógica, y para nuestra alegría ninguno de combinatoria pura, si no contamos uno extremadamente sencillo de colocar cosas en un carro de forma en que quepan todas. El resto de puzzles se muestran sorprendentemente originales y divertidos, como el poema de Fone para impresionar a Thorn o la increíblemente ágil traca final en la misma carrera de vacas, donde una sucesión de puzzles variados y rápidos se combinan formando la que posiblemente sea la mejor parte del juego, que por suerte para los chicos de Telltale se encuentra al final del mismo, lo que te deja con ganas de hincar el diente al futuro tercer episodio.

La música, a la que esta vez se le pueden hallar ciertas similitudes con Day of the Tentacle en algunos temas, se apunta al carro de las bandas sonoras que ambientan los escenarios lo suficientemente bien como para no notarse demasiado, y pone una nota alegre a un conjunto peligrosamente cercano a lo infantil, que esperemos que en futuras entregas empiece a oscurecer como prometen algunas escenas cinemáticas entre puzzle y puzzle.

El apartado gráfico también ha sido mejorado, y aunque estas mejoras no se distingan en un primer vistazo, una vez empezamos a notar la variedad de animaciones y expresiones faciales de las que hacen gala tanto los primos Bone como el resto del elenco de personajes del juego (que, por cierto, también es más amplio esta vez), nos damos cuenta que a pesar de su presunta simpleza, Bone 2 es capaz de salir airoso en muchas de las comparaciones que podamos establecer entre éste y los demás títulos pertenecientes a nuestro género. Los fondos, a su vez, también presentan una sutil mejora, pero sin duda alguna, el premio es, como hemos comentado antes, para los animadores.

Conclusión

Podemos decir sin ningún problema que los chicos de Telltale han hecho sus deberes: han mejorado tanto gráficamente como a nivel de narración e interactividad (que es lo que realmente importa en un juego, al fin y al cabo), y el resultado es un nuevo capítulo de la saga que deja en pañales al anterior.

Sin embargo, la limitación de localizaciones y el abuso de éstas y, en definitiva, la todavía escasa duración del producto no nos acaba de llenar. Cada vez vemos más claro, eso sí, que la saga al completo puede convertirse en todo un hito aventurero que nadie debería perderse, y es por ello que quizá hoy por hoy no merezca la pena adquirir ninguno de sus capítulos, puesto que si esperamos a que esté completa, tanto nuestro bolsillo como nuestro orgullo aventurero nos lo agradecerán.

Si siguen así, quizá aún haya esperanzas para Sam & Max.

Página 1 de 1

Review de Bone: The Great Cow Race
Imagen de Bone: The Great Cow Race
Imagen de Bone: The Great Cow Race
Imagen de Bone: The Great Cow Race
Imagen de Bone: The Great Cow Race
Carátula de Bone: The Great Cow Race

Nuestra puntuación

Dos estrellas y media

Bone: The Great Cow Race

Comentarios

Todavía no hay comentarios. ¡Pon el primero!

La idea de las rereviews es que sean una respuesta o una réplica a nuestra reseña, valorando el juego después de haberlo terminado. Por eso la puntuación es obligatoria. Puedes poner otra clase comentarios en la ficha del juego. Las rereviews deben ser aprobadas y pueden tardar un poco en publicarse, pero aprobaremos todas las que cumplan un mínimo de corrección, se ciñan moderadamente al tema y no contengan destripes. Si la tuya no se publica en menos de un día, pregúntanos. Por supuesto, evitaremos la censura en la medida en que hemos hecho siempre. Puedes utilizar enlaces: <a href="enlace">texto del enlace</a>; cursiva: <em>texto</em>; negrita: <strong>texto</strong>; y bloques de citas: <blockquote>cita</blockquote>.

* No se mostrará, se requiere por seguridad.

Inicia sesión o regístrate… y síguenos:

Recordar la contraseña