No nos cansamos de decir que el futuro está en Europa. Son cada día más y mejores los desarrolladores que desde aquí se empeñan en querer contarnos una historia en forma de aventura gráfica, aunque ciertamente son pocos los que al final consiguen ser escuchados por todos. Las cortapisas de la distribución internacional nos hacen la pascua a muchos, que no sólo no podemos disfrutar de los juegos en nuestro idioma sino que tampoco podemos jugarlos tan siquiera en inglés. Por suerte, de hace unos meses hasta el momento las distribuidoras han despertado de este letargo y nos están dando alegrías a algunos.

Hace ya bastante tiempo os comentábamos en una noticia el final del desarrollo de esta aventura proveniente de la lejana Rusia y desarrollada por el mismo estudio del algo más conocido Jazz and Faust, de próxima aparición en España. Aunque recelososos con la ambigua descripción que nos daban del juego en un principio, no dejábamos de albergar ciertas buenas esperanzas para con esta producción. Con el tiempo se han ido aclarando los aspectos que nos daban peor espina y ya se puede afirmar que nos encontramos con una «aventura de terror» alumna, quien sabe aún si aventajada, de juegos como Sanitarium o Countdown. Los rusos de Saturn+ han querido seguir el ya de sobra conocido patrón de atmósfera opresiva y acechadora para dar al jugador la sensación de tensión que también y tan bien se pudo sentir en clásicos como Alone in the Dark o no tan clásicos como Resident Evil. De ahí nuestras dudas acerca de la naturaleza del juego. Sin embargo, nada de survival horror, «point & click» de lo más normal, tercera persona, y nada que se salga del estándar de aventura gráfica.

El comienzo de la aventura no puede ser más desasosegante a la vez que atractivo: empezamos encerrados en una no muy cómoda bolsa de plástico, en el depósito de cadáveres de un hospital. Nos despertamos con una importante desorientación y, ante todo, sin una consciencia clara de quiénes somos ni qué demonios hacemos en una morgue. Si ya de por sí la cosa es complicada, nada más salir de la fría sala nos encontramos un panorama no muy agradable, algo o alguien se lo ha estado «pasando en grande» con el personal del hospital. Fiambres por todos sitios, siniestros juegos de luces, esquinas muy bien colocadas y algún que otro moribundo superviviente se encargarán de hacer sin duda las delicias de todos los aficionados al susto. Pero para los otros muchos que ya estamos curados de espanto ante este tipo de recursos, los señores de la escuela cosaca comentan que ésta será una aventura con trabajados y divertidos puzles, una trama muy bien urdida que no se desarrollará tan sólo en el hospital sino a lo largo y ancho de todo el pueblo, en numerosas estancias que nos mantendrán sentados delante del monitor durante bastantes horas, gracias al desafío que supone, según sus propios creadores, resolver los rompecabezas y el enigma troncal de esta prometedora aventura gráfica.

Fijándonos en aspectos técnicos, gráficamente, aunque no promete aportar nada nuevo en cuanto a innovación reventona con motores ultrapotentes y efectos espectaculares, sí se compromete a ofrecer lo bastante como para que el juego no sea acusado de tener carencias dentro de unos requisitos más que razonables, no en vano utiliza el mismo motor que su antecesor con algunas evidentes mejoras. Con todo, como podréis apreciar en las imágenes que adjuntamos, tanto escenarios («pre-render») como personajes (en tiempo real) gozan de una notable calidad que no da lugar, desde una vista preliminar, a cualquier género de queja. La música pretende poner la guinda a la inquietante estética y desarrollo del juego con el fin de aumentar la tensión de este título para adultos, donde la perversión, la sangre, el misterio y el sano humor negro están asegurados.

Como decía al principio del preview, Midnight Nowhere está padeciendo las dificultades en cuanto a comercialización internacional que ya vienen a ser tan familiares. El juego, distribuido internacionalmente por Buka Entertainment, estaba proyectado para ser puesto en venta durante el segundo cuarto del presente año, ya ha sufrido algunos retrasos y, por lo que se ve, podrá ser disfrutado en el extranjero en septiembre, si no hay más complicaciones. Aquí en España, Midnight Nowhere será distribuido por la ya veterana Friendware, lo que nos reporta un sello de calidad. Según nos comentan estará disponible en las tiendas, traducido al castellano, en agosto o septiembre del presente año. Hasta entonces, sólo queda esperar.

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