Nos es obligado felicitarnos como cada doce meses, ya que cumplimos un año más on-line, siendo este quizás un aniversario más especial respecto a los anteriores debido a lo que supone permanecer compartiendo pareceres, informando y comentando las novedades e interioridades del género durante un lustro, algo que, teniendo en cuenta lo muy volátil que es este medio de Internet, o los notables altibajos que ha padecido el género al que esta web se dedica durante el tiempo que lleva atenta a sus movimientos, nos lleva a pensar que no sería mal día para enorgullecernos un poco de lo conseguido hasta la fecha. Cinco años de dedicación que se resumen en la confianza de los muchos aficionados que diariamente entran a Aventura y CÍA con la intención de enterarse de lo que ocurre con su género favorito y de tomar parte del mismo, discutiendo y debatiendo. Vuestra permanente atención ha hecho de esta una comunidad que moviliza a un buen porcentaje de los que se consideran asiduos consumidores de aventuras gráficas y eso es una recompensa que no solo suple con creces nuestros esfuerzos, sino que nos ha hecho adquirir con vosotros una deuda que nos será difícil sufragar.

Gracias a todos vosotros, a vuestra demanda de sentimiento crítico, esta humilde web ha podido seguir creciendo como no dejará de hacerlo, ha podido prevalecer como referencia inmune a opiniones débiles y a argumentos fáciles. El permanente requerimiento de los visitantes de esta publicación es lo que nos alienta a continuar hablando de este género que muchas veces tantas pasiones encontradas despierta, y es por eso por lo que podremos continuar con nuestra particular aventura durante otros tantos años, filtrando con el tamiz de la independencia el chorreo de información que día a día destila la actualidad.

Teniendo en cuenta la deuda que voluntariamente contrajimos hace un quinquenio, no sería justo dejar de mirar al futuro del género como lo mirábamos el 14 de Agosto del 2001, y aún corriendo el riesgo de mostrarnos excesivamente entusiastas es momento mostrarnos esperanzados. Esperamos que las expectativas aventureras de los tiempos venideros satisfagan todas los requisitos que nosotros como devotos aficionados estamos en la obligación de exigir, sea como sea, de lo que si que podéis estar seguros es que seguiremos adelante con nuestra labor de la mejor manera que hemos sabido, que es como lo hemos hecho hasta el día de hoy. Por el momento, son varias las sorpresas que estamos fraguando y que a buen seguro os agradarán, tan solo deberéis hacer lo que tan bien habéis sabido hacer hasta ahora, permanecer alerta...