Jugabilidad.

A simple vista, se podría considerar Memento Mori, como una aventura de corte clásico, con el manejo de Point & Click y la vista en 3º persona siendo testigos del destino de los protagonistas, pero lo cierto es que el juego va un poco más allá. La jugabilidad es cómoda y la dificultad de los puzzles varía de entre poco complejos hasta medianamente complejos. En Memento Mori, no hay puzzles para engordar la duración, ni movimientos absurdos que dan más de un quebradero de cabeza al usuario. Tampoco sufrimos en demasía el famoso Pixel-Hunting.

Historia y ambientes.

Los entornos de Memento Mori están sumamente logrados. Los fondos en pre-render facilitan que el usuario pueda concentrarse en la trama disfrutando de las ciudades y paises por las que se sucede el juego (San Petersburgo, Portugal, Escocia, Filandia). La historia no está dotada de mucha originalidad, no deja de ser un argumento de investigación de un robo y las consecuencias de este. Pero si que se puede notar un giro que da otro sentido a la historia llegados a su final, o mejor dicho, a sus múltiples finales porque Memento Mori cuenta con diferentes tipos de finales a los que se puede llegar según las decisiones que tome el usuario a lo largo de la historia.

Los diálogos no son especialmente divertidos, ni ingeniosos pero no se hacen para nada densos.

Comentario.

Un juego bastante recomendable con respecto a las pocas Aventuras que nos dejó el 2009. Para los que le guste la jugabilidad clásica y las tramas de investigación sin mucho de especial.