El dos de noviembre de hace exactamente diez años LucasArts publicaba su penúltima incursión en el género, y la última respaldada unánimemente por la crítica. También fue su primer fiasco comercial en el mundillo de la aventura gráfica y el punto de inflexión que probablemente hizo a la empresa californiana adherirse a la falacia popular, ya entonces en expansión, de que «la aventura ha muerto». Grim Fandango entraría por fuerza en el Olimpo de los clásicos merced a una imaginativa historia que se extendía en cuatro capítulos de cuidado desarrollo, un guión cargado de referencias al cine noir y con diálogos a la altura del género, sólo igualados, quizá, por su coetáneo Discworld Noir, y un diseño de puzzles ejemplar; tanto fue así que ni siquiera deficiencias circunstanciales como el engorroso interfaz o la imposibilidad técnica de mostrar modelos 3D con el suficiente poligonado (algo que se resolvió, no obstante, muy dignamente gracias a un cuidado diseño de personajes) conseguían empañar el soberbio resultado final que a muchos nos maravilló en su día.

Pero no sería esta una efemérides suficientemente importante para recibir mención en nuestra sección de noticias (probablemente ni siquiera nos habríamos percatado de ella) de no ser porque el creador de esta obra maestra, Tim Schafer, ha decidido no sólo regalarse una tarta con la efigie del bueno de Manny Calavera grabada en chocolate para comérsela con gran parte del equipo de desarrollo original del juego, sino que ha tenido a bien en el día de ayer publicar uno de los documentos de diseño de Grim Fandango, concretamente el diseño de puzzles original, aunque también podremos ver descripciones de todas las escenas tal y como fueron concebidas originalmente, incluso algunas que finalmente fueron descartadas del producto final.

Se une así el señor Schafer a una iniciativa que ya tomara Al Lowe hace ya algunos años al liberar las hojas de diseño de sus últimas (y mejores) aventuras gráficas, documentos que podéis encontrar en su página web y de entre los que os recomendamos los de Leisure Suit Larry 6 y Leisure Suit Larry 7.

Desde Aventura y CÍA comprendemos que incluso para el fan más acérrimo la lectura de un documento como éste de 72 páginas, que es poco más que un walkthrough del juego aderezado con muchos detalles, puede suponer poco más que un coñazo más allá de la curiosidad de echar un vistazo rápido. A quienes queremos dar un toque de atención y encomendarles que lo lean es a aquellos desarrolladores que se hallen en medio de un proyecto aventurero o tengan en mente iniciarse en alguno, para que tomen ejemplo de los mejores en el género. Y no nos referimos sólo a los equipos amateur.

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